«…En política, tener visión es tener poder; y tener poder es tener visión...»
En 1999, luego de una compleja situación política que se vivía en Veracruz, el ex gobernador Dante Delgado, y su círculo de personas más allegadas, estaban haciendo realidad lo que en ese momento todavía era dar un salto al vacío en política: crear una nueva fuerza política.
Ya existían el PAN y el PRD, de hecho, un año después de esto el PAN ganó la presidencia de la república. Pero pensar en hacer un partido político nuevo, desde cero, parecía una locura. Sobre todo, en el contexto de un encono con la cúpula del poder priísta, como era el caso.
Recuerdo que un apreciado amigo me decía que lo que hoy conocemos como Movimiento Ciudadano, antes Convergencia, era como la metáfora de una casa grande, acogedora, y bien ubicada. Hoy es para muchos (segundo partido en intención de voto a nivel nacional), una opción electoral competitiva, pero esto, se ha venido forjando en el paso de casi 30 años. La generación de fundadores del partido naranja, fue la que tuvo la titánica tarea de realizar las asambleas a lo largo y ancho de la república, y de reclutar y capacitar los primeros cuadros para las contiendas electorales, algo así como construir la cimentación, estructura y muros de esa casa.
Hoy, MC oscila entre dos posibles escenarios: El de seguir creciendo y fortaleciéndose mediante triunfos graduales, o, estancarse como un partido rebasado por la frivolidad. Es curioso porque en el partido naranja coexisten personas ilustradas y preparadas, pero al mismo tiempo se han colgado personajes cuya única gracia son las redes sociales.
Por cuanto hace al caso de Veracruz, el ex Gobernador Dante Delgado ha acertado en encomendar los destinos del partido a Luis Carbonell, quien a través de un trabajo discreto pero eficiente, ha dedicado estos últimos meses a proyectar candidatos para el proceso electoral que está en curso. El dos de junio amaneceremos con una nueva perspectiva del camino que habrá de tomar MC. Hasta entonces.
Las primeras 35 columnas.
En febrero de este año, me propuse empezar a escribir de manera diaria para consignar y compartir -en principio con amigos- y con un público en general, el acontecer político de Veracruz y el país. Hoy se cumplen las primeras 35 columnas. He recibido muchos mensajes, observaciones en el estilo de redacción, precisión de hechos, incluso críticas a las opiniones aquí vertidas. A todos los que se han tomado el tiempo de leerme: ¡Gracias!
Se nos atraviesan las vacaciones de semana santa, aprovechemos estos días para convivir con la familia, leer y ver películas. Nos escribimos después de las vacaciones.